Nosotros II

Es cierto, como dicen, que no todos en el periodismo deportivo practican las ya mencionadas actividades repudiables. Eso de treparse a los autos de los jugadores, ser cadetes de ciertos futbolistas y tener poca cultura general, es propiedad de una parte pero no de todos. Hay otro sector que ya está bien ubicado en los medios y al que no le hace falta rebajarse. Son los mismos, que dentro de esta jungla, tienen una cuota de poder que la hacen valer a cada instante. Son aquellos que suelen tener el protagonismo en los micrófonos, que ponen su firma en las columnas y que opinan, la mayoría de las veces, por un interés. Son los que saben a quien criticar en el momento justo y a quien apoyar en el lugar indicado. Son los que más callan cuando más se necesita que alcen su voz. Son los que charlan con los técnicos y también con los representantes. Son los que primero se autocensuran cuando la situación implica decir la verdad sobre algún dirigente o sobre la AFA. Son los que conocen de memoria los mandamientos de la empresa que los gobierna. Son los que cuentan con una sorprendente capacidad para darse vuelta en un segundo. Son los que forman opinión desde sus páginas, sus cámaras y sus micrófonos. Son los que muchas veces predisponen al hincha con sus discursos. Son los que saben muchas cosas turbias pero prefieren callarlas. Son... muy peligrosos.